|
El pequeño Txus en la Mina Federico |
El
7 de noviembre de 1927 nacen cerca de Artzentales,
en la Mina
Federico, Jesús Dolara Larrauri y su gemelo. Su compañero durante el
embarazo permaneció con él solo 6 meses, una tosferina acabo con su vida. Sus hermanas mayores le contaron que lloraba tan desconsoladamente que tuvieron
que colocarle una almohadita siempre a su lado para que sintiera la presencia de
su hermano. Años más tarde en sus secciones de psicoanálisis, basadas en la
terapia de Jung, recuperaría en un sueño revelador la compañía de su hermano. “empecé
a nadar dentro de una cueva oscura, con mucha angustia y llegue a una rocas
donde me senté al lado de otra persona, nos quedamos tranquilos uno al lado del
otro y en ese momento toda la angustia desapareció y me sentí tranquilo y feliz”. Los relatos de su primera infancia siempre
estuvieron asociados a los sueños y a largas cartas que le escribieron sus hermanas mayores, María Luisa y Emilia, más
que recuerdos eran sensaciones.
Pero
volvamos a la familia Dolara Larrauri. Don Casimiro y Doña María, eran personas
con recursos, Don Casimiro era el gerente y pariente de los dueños de la Mina
Federico y Doña María era la única hija del primer matrimonio de la Sra Maria
viuda de Larrauri, de su segundo matrimonio nació el tío “Sopas”, persona
singular, cuyo nombre desconozco y del que
se hablará posteriormente. La abuela María, viuda por segunda vez, era la dueña del único negocio del pueblo de
Artzentales. Los Dolara Larrauri tuvieron
12 hijos y el pequeño Txus se llevaba 20 años con su hermana mayor. Vivian holgadamente,
con sirvientas, cocheros y hayas y todavía hoy se pueden contemplar las ruinas
del poblado, la casa y la iglesia, dedicada a la virgen María, (en honor a la
madre de Txus) que fundó don Casimiro.
Como toda persona de buena posición eran monárquicos y de derechas. El Sr Casimiro había sido
condecorado por el rey
Alfonzo XIII por salvar su vida cuando un carruaje en el que paseaba se desboco.
Según sus hermanas Txus amaba el agua y
a los animales. Se perdía por momentos y siempre lo encontraban en la fuente
del pequeño poblado jugando con el agua y empapado sin importar la estación del
año.
|
Don Casimiro Dolara Garate |
|
doña Maria larrauri Uria |
De
esta época Txus recuperó con el psicoanálisis,
a través de los sueños, las botas de montar y el olor a cuero que asociaba a su padre, la cara de terror de su madre al asomarse en
la cuna y ver a su gemelo muerto y sensaciones y emociones que le acompañaron
siempre. Su memoria de estos años, no se
traducían en recuerdos concretos estaba
asociada a los sueños. Todavía los guardamos todos, anotados en hojas ya
amarillas, con letras desdibujadas, de las que nunca quiso deshacerse pues como decía Borges “…Nosotros estamos
hechos, en buena parte, de nuestra memoria…” y su memoria y su
identidad, en estos primeros años, solo las recuperó en sus sueños.
Cuando Txus tenía 3 o 4 años su padre murió. Esta vida
apacible, llena de lujos y contemplaciones terminó abruptamente, como terminarían
muchas cosas en su larga vida.
|
Mina Federico y fotos familiares de los Dolara Larrauri |
HOla Ana, Gracias por compartir esta memoria tan personal. Las personas viven para siempre cuando se les recuerda. Un besote Juan Leoncio.
ResponderEliminarHola Profe. Ana, al contar la historia de su esposo, estoy segura muchos aprenderemos sus vivencias y de las maneras de vivir y enfrentar cada circunstancia y momento que nos presenta la vida. Ansiosa por conocer y aprender más de su esposo. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarYa en pricipio la historia esta llena de muchas emociones
ResponderEliminar